Cómo usar comandos para dictar texto en tu iPhone

4.2/5 - (90 votos)

Introducción al dictado por voz en iphone

Hablar y que el iPhone escriba por ti es una experiencia liberadora: puedes redactar mensajes, notas o emails sin tocar una tecla, incluso mientras paseas o tienes las manos ocupadas. El dictado de voz de iOS convierte tu voz en texto en tiempo real y, con los comandos adecuados, también corrige, formatea e inserta símbolos o emojis al vuelo. Esta guía completa te enseñará a activar el dictado, utilizar comandos para editar, añadir puntuación, crear nuevos párrafos, insertar emojis e incluso a nombrar elementos en pantalla para accionar botones con la voz.

Qué puedes hacer con el dictado en tu iphone

El dictado de iOS permite introducir texto con la voz en la mayoría de aplicaciones que utilizan el teclado, como Mensajes, Mail, Notas y buscadores. Cuando aparece el icono de micrófono en el teclado, puedes tocarlo y empezar a hablar, y el sistema transcribe sobre la marcha junto al punto de inserción. Además de escribir, el dictado entiende órdenes sencillas para formateo, como ‘nuevo párrafo’, ‘coma’ o ‘signo de exclamación’, aplicando la puntuación o el salto de línea sin necesidad de tocar la pantalla.

En algunos idiomas, iOS también reconoce nombres de emojis. Frases como ‘emoji de corazón’ o ‘emoji de cara sonriendo’ insertan el correspondiente emoji en el texto. La disponibilidad de este soporte por voz varía según el idioma del teclado, por lo que es recomendable consultar la web de funciones de iOS y iPadOS para obtener información actualizada.

Un detalle útil es que, si no recuerdas el nombre exacto de lo que ves en pantalla, el Control por voz puede mostrar etiquetas con nombres o números sobre los elementos. Después, basta con decir el nombre o el número para pulsarlos, o añadir un comando como ‘pulsación larga’ para otras interacciones.

Cómo activar y empezar a dictar en iphone

Activar el dictado es un proceso sencillo. En iPhone y iPad, abre Ajustes > General > Teclado y activa ‘Dictado’. Desde ese momento, verás el icono del micrófono en los teclados del sistema y podrás cambiar de escribir a hablar cuando lo desees.

Para iniciar un dictado, entra en cualquier aplicación que tenga un campo de texto, toca dentro para situar el cursor y pulsa el micrófono del teclado. En la barra de entrada, verás la forma de onda y/o un indicador junto al punto de inserción, indicando que el dispositivo está escuchando y transcribiendo. Comienza a hablar con naturalidad, sin cortar cada palabra, y vocaliza. Si necesitas un salto de línea, di ‘nueva línea’ o ‘nuevo párrafo’; para puntuación, di ‘coma’, ‘punto’, ‘signo de interrogación’ o ‘signo de exclamación’.

Si cometes un error, puedes editar con la voz: di ‘seleccionar’ seguido del fragmento para marcarlo, y luego ‘eliminar’ o dicta el reemplazo. Si cambias de idea, ‘deshacer’ y ‘rehacer’ están disponibles como comandos para revertir acciones recientes. Cuando termines, pulsa de nuevo el micrófono o quédate en silencio; si pasas unos 30 segundos sin hablar, el dictado se detiene automáticamente. Es buena práctica repasar lo escrito por si hubiera pequeñas confusiones que quieras ajustar a mano.

Comandos clave de edición, formato y símbolos

El poder del dictado no está solo en transcribir lo que dices, sino en cómo lo formatea. Aquí tienes un repertorio amplio de órdenes útiles. Úsalas tal cual mientras dictas para mantener el flujo sin tocar el teclado.

  • Puntuación básica: di ‘punto’, ‘coma’, ‘punto y coma’, ‘dos puntos’ o ‘puntos suspensivos’ (también puedes decir ‘tres puntos’).
  • Interrogaciones y exclamaciones: ‘abre signo de interrogación’ / ‘cierra signo de interrogación’, ‘abre signo de exclamación’ / ‘cierra signo de exclamación’.
  • Comillas: ‘abre comillas’ y ‘cierra comillas’ para encerrar una frase. También puedes usarlas alrededor de títulos o citas.
  • Paréntesis y corchetes: ‘abre paréntesis’ / ‘cierra paréntesis’; ‘abre corchete’ / ‘cierra corchete’.
  • Nuevas líneas y párrafos: ‘nueva línea’, ‘nuevo párrafo’ o ‘punto y aparte’ según el estilo que busques.
  • Números: al dictar cantidades completas, el sistema suele formatearlas en cifra. Por ejemplo, ‘un millón cincuenta mil cuatro’ se convierte en 1.050.004. En algunos entornos Windows se usa el prefijo ‘numeral’ antes de la cantidad.
  • Signos y operadores: ‘guion’ (-), ‘subrayado’ (_), ‘apóstrofe’ (también ‘apóstrofo’ en Windows), ‘asterisco’ (*), ‘barra’ (/), ‘barra vertical’ (|), ‘diagonal inversa’ ().
  • Símbolos comunes: ‘almohadilla’ (#), ‘arroba’ (@), ‘signo del dólar’ ($), ‘signo del euro’ (€), ‘tanto por ciento’ (%), ‘signo de más’ (+), ‘signo de menos’ (-), ‘signo de igual’ (=), ‘signo de multiplicación’ (x), ‘mayor que’ (>), ‘menor que’ (<), ‘copyright’ (©), ‘registrado’ (®), ‘marca comercial’ (™).
  • Mayúsculas y estilo: ‘mayúscula inicial’ para poner en mayúscula la primera letra de lo que digas a continuación; ‘todo mayúsculas’ o ‘todo minúsculas’ para la siguiente palabra; ‘activar todo en mayúsculas’ / ‘desactivar todo en mayúsculas’ para mantener ese estilo durante varias palabras; lo mismo con ‘activar todo en minúsculas’ / ‘desactivar todo en minúsculas’.
  • Sin espacios: ‘activar sin espacio’ / ‘desactivar sin espacio’ para escribir todo junto a partir de ese punto (muy útil para hashtags).
  • Deletrear: si necesitas precisión en un nombre propio, di ‘deletra’ o pronuncia la palabra partiendo por letras: por ejemplo, ‘Esteban, E-S-T-E-B-A-N’.
  • Edición rápida: ‘seleccionar’ + frase para marcar; ‘eliminar’ + frase para borrar; a continuación dicta el reemplazo. ‘deshacer’ y ‘rehacer’ corrigen acciones previas.

Recuerda que estos comandos se emiten hablando de forma natural. Intercalar órdenes cortas con tu dictado mantiene el texto limpio y con el formato que quieres sin romper el ritmo.

Emojis y emoticonos por voz

En idiomas compatibles, iOS reconoce el nombre de muchos emojis. Frases como ‘emoji de coche’, ‘emoji de corazón’ o ‘emoji de cara sonriendo’ insertan el pictograma correspondiente en el texto. Si no estás seguro del nombre, puedes consultar listados o directorios de emojis para confirmar cómo llamarlos. Cuando el idioma del teclado coincide con el idioma en el que nombras el emoji, la detección es más fiable.

Además de emojis, algunos entornos aceptan emoticonos clásicos. Expresiones como ‘cara feliz’ (:-)), ‘cara triste’ (:-() o ‘guiño’ (:-)) pueden producir sus equivalentes de texto donde se admitan. Como norma, utiliza los emojis con moderación si buscas claridad. En mensajes informales aportan matiz y tono sin necesidad de escribir descripciones largas.

Control por voz: nombres y números sobre los elementos

Cuando no recuerdas cómo se llama un botón o un control, puedes pedir ayuda visual. Activa el modo que muestra etiquetas con nombres o números sobre cada elemento y así podrás referirte a ellos por voz. Di «mostrar nombres», «mostrar números» o «mostrar números de texto». El sistema superpone etiquetas temporales en la pantalla. A continuación, di el nombre o el número para interactuar con el elemento, o añade una acción: por ejemplo, «pulsación larga» seguido del nombre o número.

Una vez ejecutado el comando, las etiquetas desaparecen solas. Esta capa visual acelera mucho la navegación completamente manos libres cuando no estás tocando la pantalla.

Idiomas de dictado y teclados

El dictado usa el idioma del teclado activo. Si cambias de teclado con la tecla del globo, también cambias el idioma de entrada por voz. Esto permite alternar entre español, inglés, francés, chino, japonés y muchos otros si los tienes añadidos. Para gestionar idiomas ve a Ajustes > General > Teclado y añade los teclados que necesites. Con un solo toque alternas y el dictado entiende mejor tu acento y vocabulario en cada idioma.

Dictado también en mac y en windows

En Mac, abre Preferencias del Sistema > Dictado y habla (o su apartado actual equivalente) para activarlo. Puedes iniciar el dictado con una función rápida, por defecto pulsando dos veces la tecla Fn, o desde el menú Edición de apps como TextEdit o Word. Hay dos modalidades clásicas en macOS: el dictado estándar, que graba tu voz y la procesa en servidores de Apple tras pulsar fin, y el ‘Dictado mejorado’ disponible desde OS X Mavericks en adelante. El dictado mejorado descarga componentes (varios cientos de MB en español) y procesa en local, mostrando texto en tiempo real y preservando mejor la privacidad.

En Windows (Vista, 7, 8, 8.1 y posteriores) busca ‘Reconocimiento de voz’ y ejecútalo. El sistema se ancla como una barra flotante y, al activarlo, entra en modo escucha para transcribir lo que dictas. Puedes entrenar el reconocimiento para adaptar el modelo a tu pronunciación. En ambos entornos también existen comandos de formato y edición. Algunas denominaciones varían (por ejemplo ‘apóstrofo’ frente a ‘apóstrofe’, o la palabra ‘numeral’ antes de cantidades), pero la lógica general es muy similar.

Buenas prácticas para ganar precisión y velocidad

Habla a un ritmo natural pero claro. Evita ruidos de fondo acercándote al micrófono y vocalizando; en exteriores, gira el teléfono hacia ti para que te oiga mejor. Aprovecha los comandos de puntuación y formato. Decir ‘coma’, ‘punto’ o ‘nuevo párrafo’ mientras fluyes ayuda a que el texto salga ya estructurado. Si te trabas, sigue dictando y corrige al final. Muchos usuarios prefieren ‘dictar primero y pulir después’, corrigiendo con selecciones rápidas o pequeños retoques con el teclado.

Para reemplazar una palabra, selecciónala y habla el reemplazo. También puedes decir ‘seleccionar’ + término y a continuación la nueva palabra para cambiarla sin tocar nada. Recuerda que, si te quedas callado, el dictado puede parar. Si necesitas pensar, dale a pausar tocando el icono del micrófono y vuelve cuando lo tengas claro.

Privacidad: qué se envía y cómo gestionarlo

El dictado estándar puede enviar fragmentos de audio a los servidores de Apple para convertirlos en texto. Apple indica que estos datos se usan para mejorar Siri y dictado y no se vinculan a tu ID de Apple ni se destinan a publicidad. Aun así, si vas a tratar información especialmente sensible, valora métodos alternativos o espera a teclearla. En Mac, el modo ‘mejorado’ procesa en el propio equipo, una opción interesante si priorizas privacidad.

Revisa la política de privacidad y los ajustes de Siri y dictado en tu dispositivo. Controlar qué funciones de aprendizaje y envío están activas te ayuda a decidir según tu caso de uso.

Más allá del dictado en tiempo real: transcripción asistida

El dictado en directo es comodísimo, pero no siempre es perfecto, sobre todo en ambientes ruidosos o con audios largos. Si quieres máxima precisión, considera apps de transcripción como Transkriptor, que permiten grabar notas de voz y convertirlas a texto con muy alta fiabilidad. Estas herramientas soportan más de 100 idiomas, separan hablantes y ofrecen editores para revisar cómodamente. Son ideales para reuniones, entrevistas o clases donde necesitas una transcripción limpia y bien organizada en tu iPhone.

También ganan en flexibilidad: puedes grabar y transcribir cuando te venga bien, y luego copiar el texto a tus apps favoritas. Si la velocidad y la precisión son clave en tu flujo de trabajo, merece la pena probar una solución de este tipo.

Guía paso a paso rápida para empezar

  1. Activa el dictado en Ajustes > General > Teclado.
  2. Abre una app con campo de texto y toca el micrófono.
  3. Habla claro mirando el iPhone.
  4. Usa comandos: ‘coma’, ‘nuevo párrafo’, ‘abre comillas’, ‘cierra paréntesis’.
  5. Para terminar, toca el micrófono o deja de hablar.

Si quieres afinar todavía más, explora comandos avanzados como ‘activar sin espacio’ para hashtags, o ‘mayúscula inicial’ para títulos. También puedes crear atajos para automatizar acciones frecuentes. Con práctica, editar por voz se vuelve natural y muy rápido.

Un apunte de compatibilidad: el dictado está disponible en iPhone desde modelos muy antiguos (como 4S en adelante), iPad desde las primeras generaciones modernas y también en Mac y PC con herramientas propias. La implementación actual en iOS es estable y madura, y permite ver cómo el texto aparece a medida que hablas. En el día a día, verás que el dictado ahorra tiempo en respuestas rápidas, toma de notas y creación de borradores. Cuanto más lo uses, mejor se adapta a tu forma de hablar y menos tendrás que corregir.

Dominar los comandos de voz marca la diferencia entre un dictado plano y uno bien formateado. Con saltos de línea, comillas, paréntesis y símbolos, tu texto sale listo para enviar sin necesidad de edición profunda. Como ves, no se trata solo de hablar al teléfono: se trata de hablar con intención, pidiéndole exactamente qué quieres que haga y dejándole el teclado para lo imprescindible. Con todo lo anterior, ya tienes las piezas para convertir el dictado en una herramienta diaria: activación, listas de comandos, emojis, control por voz de elementos, idiomas, plataformas, consejos y privacidad. Si integras estos hábitos, escribir con la voz se vuelve tan natural como teclear, pero más rápido cuando realmente lo necesitas.